martes, 10 de enero de 2012

La Mala D.F presenta: México somos todos.










Antes que nada, un saludo a todos nuestros lectores que se toman el tiempo para leernos, quisiera esta vez, hablar de un tema que va de tirada más seria; lo que pasa, no es que ya nos hallamos vuelto aburridos, pero la situación actual en nuestro panorama nacional es bastante triste, LEJOS, de ser aterradoramente violenta, creo en verdad, de la manera más sincera y personal, que tanta violencia, corrupción y malos manejos, no caben dentro de la palabra “aterrador” o “incorrecto”, sin embargo, se dan buena cabida dentro de la palabra “tristeza”.

Y déjenme que les platique algo de la palabra “tristeza” antes de continuar; según la página www.deconceptos.com , la definición de tristeza es la siguiente:

“Es un estado anímico o afectivo, de contenido negativo, donde la persona siente abatimiento, deseos de llorar, expresado o no, y baja su autoestima.

Es una emoción frecuente, motivada por las contrariedades de la vida, que nos quitan la alegría por un periodo de tiempo,  más o menos prolongado, como la enfermedad o muerte de un ser querido, la reprobación de un examen, la pérdida del empleo, una pelea con familiares o amigos, la enfermedad propia, etcétera. Es lógico que no se pueda estar contento todo el tiempo, y eso es normal. La tristeza cuando se prolonga en el tiempo, e impide realizar las tareas cotidianas, puede convertirse en DEPRESIÓN, que es una enfermedad que necesita ser profesionalmente tratada.

La tristeza es pasajera, se siente melancolía pero se vislumbra la luz al final del túnel; desaparecida la causa que la provoca, el sujeto vuelve a gozar de su existencia. Sin embargo,  en la depresión la angustia está establecida para quedarse, y hacer que la vida NO NOS BRINDE NINGUNA OPORTUNIDAD […] “.


Y bueno, ¿a qué les suena esto?

Si me permitieran hacerles una pregunta mis queridos lectores, sería:







¿Cómo se sienten respecto a la situación actual de su país?





Porque el estado anímico en cuestión de política, derechos, bienestar social y en materia de empleo, educación y salud, se describe perfectamente con la información relacionada al concepto de “tristeza”.

Y es que vivimos en un país donde los policías abiertamente disfrutan de su mala fama, de su triste realidad y hacen buen uso (o al menos para ellos mismos) de ella; aprovechándose de la gente, aprovechándose de las circunstancias, aquellos que portan un informe de color azul y que se supone deberían cuidar cada calle, esquina y avenida de nuestra nación, son precisamente ladrones con un anuncio y permiso para robar.

¿Ladrones con un anuncio?

Sí, y lo aclaro,  un cabrón en sudadera y con una navaja escondida es difícil de reconocer porque tiene una vestimenta como la mía y como la tuya, pero un policía, al menos avisa que ya salió a recoger el impuesto por ser mexicano prendiendo una sirena que más que cantar “anuncia llorando” que los lobos van a cazar.

Es imposible señores que vivamos en una nación donde nuestras autoridades tengan una fama IRREFUTABLE de ladrones, secuestradores y asesinos, y aún así el pueblo PERMITA que estos hijos de trece mil quinientas veintisiete chingadas sigan viviendo sus vidas campantes.

Sé muy bien que ninguno de estos hijitos de puta llegarán a leer esta entrada PRINCIPALMENTE porque hay que saber leer para poder hacer eso, cosa que estos hijos de novecientas putas por supuesto NO SABEN; sin embargo, si alguno de ellos llegará a leer esto yo le preguntaría:


¿Mata el hambre?
¿Robarle a la gente honesta, mata el hambre?
¿Dejar correr al culpable y chingarte al inocente te cobija?
¿Tus mentiras, tus tranzas, tu corrupción te da abrigo en las noches?

¿Cada que te chingas a un ciudadano honesto que paga impuestos como tú, que nació en México como tú,  te sientes orgulloso? ¿Cuándo eras pequeño y tus padres cometieron el error de darte la vida, esto era lo que esperaban de ti? ¿Qué contribuyeras a joder más al país? ¿A la gente que se levanta a las 4 de la mañana y sale de trabajar a las 10?

Porque déjenme confesarles algo amigos míos, yo, antes solía odiar vivir en México, porque me hicieron creer que México era un país de corrupción e inseguridad, donde uno no puede ni salir a beber una chingada cerveza sin miedo a que el pendejo de al lado sea sicario o hijo de narcos o políticos y te saque una pendeja pistola por si le caíste mal; porque pensaba que México era la bola de imbéciles que manipulan a los medios de comunicación poniéndolos de perrito y permitiendo que el silencio y la censura se los coja para que el pueblo no se entera de las mil y un chingaderas que hacen a diario; yo odiaba México porque pensaba que México significaba muertes, cárteles de droga asesinando hombres, niños y mujeres, porque pensaba que México era toda la bola de hijos de puta que lo dirigen y no piensan UNA CHINGADA en aquellos que los pusieron en los puestos donde se la viven robando el dinero; me hicieron creer que México significaba un montón de mentiras y engaños, un policía que solamente  me contesta “levanta una denuncia, lo demás ya es papeleo, aquí no es como en las películas, nadie va a emprender una investigación, te chingaron, levantas la denuncia, y eres una cifra más”, un oficial de tránsito que me dice “sus ventanas son de plástico, me va a tener que acompañar a la delegación y pagar una multa de $5,000 pesos”, un noticiario que habla de un país que no existe, porque nunca pasa nada, porque solamente se habla de problemas pequeños, mientras más de un millón de personas mueren de hambre, otros tantos miles mueren en la supuesta “guerra contra el narco”, y ¿saben qué? …


Gracias a Dios me di cuenta a tiempo. Que nada de lo que dije era verdad.


Porque México no es el que roba, si no el que nació en condiciones adversas y aún así, busca, lucha y consigue salir adelante a pesar de las circunstancias, porque México es el joven que decidió trabajar y estudiar en vez de vender drogas y matar gente; porque México es aún la esperanza de cada niño que nace a diario y la luz en los ojos de una madre responsable, de un padre trabajador; México es el pescador que se levanta a las 3 de la mañana a trabajar, el empleado que mantiene una sonrisa, el señor que da bola a los zapatos en vez de estar asaltando en los camiones, el taxista que se aguanta 7 horas de tráfico bajo un sol de la chingada, el obrero que a pesar de las condiciones, se levanta temprano y sale tarde por trabajar y darle de comer a su familia; México es el cabrón de tu escuela que prefiere reprobar a copiarle al de al lado, México es esa persona que a pesar de que tú la jodes en la escuela, sigue yendo porque el día de mañana probablemente vaya a ser quién te de un empleo, México es una madre yendo por sus hijos a la escuela, es un hombre trabajador que daría lo que fuera por sacarse la lotería solo para poder dejar a un lado la necesidad y pasar más tiempo en casa con su familia, México eres tú que aún se la armas de pedo a estos pinches cerdos injustos y buenos para nada, México eres tú uniéndote a una manifestación en vez de quedarte en casa viendo la TV, México eres tú, soy yo y somos todos.


Porque aunque parezca que México está mal, siempre tenemos que recordar que México, nuestro país, está en cada uno de nosotros, Y SÍ, habrá MILES DE COSAS QUE NOS HAGAN MEGA ENCABRONAR, pero tenemos que salir adelante y siempre luchar por un futuro mejor, porque el cambio empieza por uno mismo, porque las ganas de vivir y luchar están en cada uno de nosotros que conformamos este país.

Porque si tú te deprimes, deprimes la esperanza de un mexicano positivo, de una buena persona en nuestro país. México somos todos. México eres tú. 

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